lunes, 9 de noviembre de 2009
domingo, 8 de noviembre de 2009
PROBLEMAS DEL MERCADO INFORMAL
El caos causado por el comercio informal es aprovechado para traficar con especies autóctonas. Vivo, en aceite o su carne, suele ofertarse el pacazo.Tema aparte, es la contaminación por ruido. Chiclayo fue subsede de la Copa América Perú 2004, en noviembre pasado, y los turistas argentinos, uruguayos, mexicanos y ecuatorianos, quedaron pasmados por el cotidiano escándalo sonoro, que en sus ciudades natales está regulado y prohibido, en resguardo del sistema nervioso. Desde muy temprano, las calles chiclayanas se ven bombardeadas por mensajes simultáneos de megáfonos ofertando fruta, bocinazos ofreciendo “un carrera” o expresando ansiedad a otro conductor, altoparlantes fuera de los comercios, entre otros. Los hospitales Las Mercedes y Naylamp, del Ministerio de Salud y de la Seguridad Social respectivamente, se encuentran expuestos diariamente a esta práctica atentatoria.
Calle Arica. La actividad informal, alrededor de los mercados, y la deficiente limpieza pública, agravan el problema de contaminación ambiental en el centro de Chiclayo.
MERCADOS Y CAMPOS FERIALES
Se ha comprobado que en la capital existen 274 mercados informales. De ellos el 64% ha sido edificado por los ambulantes mismos a travÚs de sus organizaciones y el 285 por empresas formalmente establecidas por encargo de los informales o pera ser vendidos por ellos, sobre el 9% restante no se tiene informaci¾n. En general, se trata bßsicamente de establecimientos fuera de la via publica, edificados con material noble, debidamente equipados con cßmaras frigorificas, almacenes, puestos individuales y servicios higiÚnicos.
Como adelantamos el ILD comprobó que en la capital del total de mercados informales, el 63% ha sido edificado por los ambulantes mismos a través de sus organizaciones y el 28% por empresas formalmente establecida por el encargo de los informales o para ser vendidos a ellos; sobre el 9% restante no se tiene información.
En general se trata básicamente de establecimientos fuera de la vía pública edificados con material noble debidamente equipados con cámaras frigoríficas almacenes puestos individuales y servicios higiénicos.
De acuerdo con las informaciones recabadas la mayor concentración de esos mercados se encuentra en San Juan de Lurigancho, luego le siguen Lima, Comas y San Martín de Porras. Al final de la tabla van Magdalena del Mar, Miraflores y San Borja al igual que San Isidro y la Molina.
Todo ello acredita que los mercados informales se encuentran básicamente al servicio de las clases menos acomodadas, toda vez que más de la mitad de los mercados existentes se hallan en asentamientos informales.
No obstante a través del gobierno central o los municipios, el Estado ha tratado de terciar este proceso aunque infructuosamente.
En vista a las limitaciones del estado para construir mercados desde 1981 los municipios han empezado a habilitar campos feriales como otra manera de reubicar a los ambulantes fuera de la vía pública. De esta forma han habilitado los campos feriales de "Polvos Azules", "Amazonas", "Miguel Grau", "Virgen de Lourdes", "Plaza Castañeda", "Polvos Rosados", "Naranjal" y "Las Malvinas".
En este caso sin embargo, no se trata de construcciones debidamente equipadas sino precarios "mercadillos" construidos con madera y estera sobre la misma calle. Además a diferencia de los que sucede en los mercados en estos campos feriales el Estado a tratado de inmiscuirse directamente en la actividad empresarial de los comerciantes a través de una serie de restricciones en el uso y traspaso de los puestos. No obstante los cual estas operaciones han continuado realizándose a espaldas de las autoridades.
En realidad la importancia de los campos feriales es pequeña dentro de la totalidad del comercio informal a pesar del interés político que han tenido las autoridades al auspiciarlos.
Si tomamos en consideración el valor de los mercados informales respecto de la inversión efectuada en los campos feriales, la comparación favorece a los mercados: frente a los 40,9 millones de dólares en infraestructura de los mercados informales los municipios han invertido en los campos feriales solamente 85 mil dólares. Aún si consideramos el aporte de los ambulantes en el mejoramiento de sus puestos dentro de los campos feriales que asciende a 405 mil dólares la diferencia es abismal.
MERCADOS INFORMALES
La segunda modalidad de comercio informal es la que se desarrolla desde mercados construidos informalmente por a para ambulantes que sean abandonar las calles.
En lo fundamental los ambulantes tratan de dejar la vía pública porque éste les impone una serie de limitaciones. En la calle, los derechos especiales de dominio a pesar de todo no ofrecen seguridad suficiente para estimular una inversión a largo plazo que mejore la función minorista de los ambulantes porque en esos lugares no es posible suscitar expectativas racionales de propiedad.
Así mismo, los ambulantes tienen una productividad muy baja, debido a que la diversificación de bienes y servicios ofrecidos por cada uno es extremadamente reducida.
Los ambulantes están limitados pues por todos los inconvenientes que se desprenden de su carácter informal. Rara vez dan crédito y no brindan reparaciones ni garantías. Tampoco tienen instalaciones especiales para probar los productos ni están en condiciones de proporcionar una información especializada a sus clientes. Todo estos los excluye de comerciar productos sofisticados en los cuales los servicios conexos sean importantes para el cliente. Además enfrentan problemas derivados de la falta de almacenes acondicionados y sistemas de seguridad.
Todas estas limitaciones hacen que los ambulantes tengan un estímulo muy frente para salir de las calles y reemplazar la carretilla por el mercado en busca de derechos de propiedad más seguros que los especiales de dominio.
QUE PROVOCA EL COMERCIO INFORMAL
Continuamente escuchamos hablar de los problemas que ocasiona el comercio informal en la vida de una comunidad, se dice que provoca problemas de tráfico, fomenta la piratería, que no paga impuestos y daña el comercio establecido, pero lejos de eso que hay detrás de los comerciantes informales, cuales son las causas que los orillan a realizar una actividad que para muchos puede ser informal y hasta ilegal, son en realidad estos comerciantes la causa del problema o son simplemente víctimas de las malas administraciones, el desempleo y los altos impuestos.
Aunque el comercio ilegal sigue siendo una opción para el desempleo, también es un recurso para la evasión de obligaciones fiscales y empresariales, lo que debilita las finanzas públicas.
Comúnmente se piensa que el comercio informal está integrado por los puestos ambulantes o semifijos. Sin embargo, quienes se encuentran en la ilegalidad están en todos los sectores: desde el comercio hasta los servicios profesionales.
La Secretaria de Hacienda y Crédito Público incluye en el sector informal a la llamada economía oculta y actividades ilegales como producción nacional no registrada; industrialización y distribución de enervantes o estupefacientes; producción pirata y distribución de software, casetes y videos; usura; reventa de taquilla; intervenciones quirúrgicas desautorizadas; servicios profesionales no registrados, y comercio y transporte de mercancías de contrabando entre otras.
EL COMERCIO AMBULATORIO EN CHICLAYO
Aquí también se suman las deficiencias en la planificación urbana, la falta de políticas adecuadas y los anillos de pobreza al rededor de la urbe, factores que provocan el vuelco de comerciantes ambulantes que buscan su subsistencia.
Trabajadores despedidos intempestivamente, uniones conyugales que formaron hogares improvisados, víctimas de estafa, o quienes sucumbieron a la política económico de los últimos gobiernos, son quizás algunas de las principales causas que impulsan el crecimiento desmedido del comercio ambulatorio, vista como única alternativa para llevar el alimento a casa. Esta actividad, de innegable origen social, es sin duda uno de los mayores males que aqueja a Chiclayo, .